Un buen huevo
¿Sabías que en España se producen unos 15.000 millones de huevos al año? 15.000.000.000... ¡son muchos ceros! Ana y Dani están encantados de contarte más cosas sobre los huevos de gallina. ¿Quieres oír lo que tienen que decir?
¿Sabías que...?
El español medio come 140 huevos al año. No sólo huevos fritos, sino también huevos cocidos, revueltos, tortillas, en galletas, pasteles, etc.
Formas y tamaños de los huevos
Hay dos tipos de huevos:
- Huevos de mesa: son los huevos que comemos en casa. Cumplen con unos requisitos de calidad especiales.
- Huevos de industria: son los huevos que se utilizan para hacer galletas y pasteles, e incluso champú.
Cada huevo tiene un tamaño diferente, como la ropa. Un huevo pequeño es S (Pequeño), luego tienes M (Mediano), L (Grande) y XL (Extra Grande). Si quieres comprar un huevo en el supermercado, puede que veas muchos tipos diferentes.
La clara, la yema y los colores del huevo
Un huevo se compone principalmente de lo que llamamos clara. Es la parte clara y ligera del huevo que se vuelve blanca cuando lo fríes o hierves. La yema es la parte amarilla o anaranjada del huevo. Si el huevo está fecundado, la yema sirve de alimento al polluelo. En las gallinas ponedoras, el huevo nunca está fecundado.
A veces, la yema es amarilla y otras veces es naranja. Esto viene determinado por la alimentación del animal. La cantidad de maíz que come una gallina también afecta al color de la yema. La gente suele comer huevos diferentes en los distintos países: En España, nos gusta una yema muy, muy naranja, en Holanda, comen huevos con una yema entre amarilla y naranja y en Alemania, la gente prefiere una yema naranja.
- ¿Imaginabas que un sencillo huevo tuviera tantas partes distintas?
¿Sabías qué la alimentación de las gallinas ecológicas no afecta al color de la yema? La yema de un huevo ecológico es siempre amarilla.
Los números de los huevos del 0 al 3
Cada huevo tiene un código impreso en su cáscara que nos dice de dónde procede del huevo y el tipo de vida que ha tenido la gallina. El primero de los números nos indica el tipo de gallinero en el que vive la gallina. Hay cuatro posibles:
- Número 3: Un huevo de jaula, que procede de gallinas ponedoras criadas en naves que contienen grandes jaulas. Las jaulas deben tener más de dos metros cuadrados, con suficiente espacio vital para cada gallina. El fondo es de malla, para que los excrementos de la gallina caigan a través de ella, y no tenga que caminar o sentarse en ella. También hay aseladeros (barras donde sentarse) en la jaula y nidales para que las gallinas pongan huevos.
- Número 2: Un huevo de aviario que proviene de una gallina que vive en un nave con espacio para moverse. A las gallinas les encanta rebuscar, y las gallinas de aviario tienen suficiente espacio para hacerlo dentro. Hay mucha paja en el suelo, que pueden picotear y arañar.
- Número 1: Un huevo de gallina campera que proviene de una gallina campera. El gallinero en el que vive una gallina campera tiene más o menos el mismo tamaño que el de una gallina de aviario. Pero las gallinas camperas pueden salir al exterior durante el día y disfrutar de mucho espacio. La zona exterior está cubierta de hierba y árboles.
- Número 0: Un huevo ecológico, puesto por una gallina alimentada especialmente con pienso ecológico. Las gallinas tienen más espacio y luz natural en el gallinero, y pueden salir durante el día a espacios cubiertos o al aire libre.
Huevos con Omega-3
Incluso hay huevos con Omega-3. Estos provienen de gallinas a las que se les ha dado un extra de ácidos grasos Omega-3. Eso es bueno para la gallina y también para ti.
Mucha gente dice que prefiere los huevos ecológicos. Pero las investigaciones demuestran que apenas se nota la diferencia. Lo que sí puedes apreciar es la diferencia entre un huevo recién puesto y uno que lleva tiempo en el mercado.
¿Sabías que puedes saber de qué color será un huevo por el lóbulo de la oreja de la gallina? Las gallinas blancas suelen poner huevos blancos, y las gallinas marrones ponen huevos marrones. Pero no siempre es así. Fíjate en los lóbulos de las orejas de las gallinas. Si son blancos, ¡tendremos un huevo blanco! Si son rojos, tendremos un huevo marrón. Pero no tienen un sabor diferente.
Ana y Dani visitan una granja de gallinas ponedoras
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Así que te han dado un proyecto para trabajar. ¿No sabes por dónde empezar? No te preocupes. Con estos consejos de Ana y Dani seguro que lo harás bien.
